EL ENCENDIDO DEL ARBOL....
Recorrer un camino de nueve encuentros no sana a nadie por el simple hecho de caminar sin ver . La transformación ocurre solo cuando existe un interés genuino, sincero y casi desesperado por el cambio. El hecho de que grandes maestros y seres hayan alcanzado la metanoia nos invita a emprender ese camino hacia el autoconocimiento, alejándonos de la disonancia con una Frecuencia Sublime que existe pero a la cual aún no hemos abierto el canal. La frecuencia Sublime está ahí, pero falta que sintonicemos con ella. Es por eso que las enseñanzas se convierten en guías que nos permiten estar más sintonizados y entrenados en un lenguaje sublime, sosteniendo la actitud correcta y revirtiendo la mirada a lo sustancial.
Mientras tanto, vivimos, claro que vivimos porque estamos respirando, pero a veces se siente la asfixia, aun estando en el océano de oxígeno, y no hay nada mecánico que la esté obstruyendo... es porque se está viviendo dentro de una falsificación de la realidad SUBLIME que nos habita. Al vivir en esa falsificación, solo reproducimos…mas billetes falsos…perdon realidades falsas… sin trascender las asfixias.
Detenerse a observar si se trata la asfixia producto de vivir la falsificación de la realidad, ya el hecho de frenarse… detiene a la mente...de la programación matrixada.
¿Cómo es que vivimos una falsificación?, si lo que veo, toco, oigo... es... es un shock que hace observar a la mente... las puertas que están selladas y que están produciendo la asfixia... Se estremecen …y el brillo de la sala Derecha…llena de magnificiente luz… se vislumbra… Confrontar la verdad que la creación espera, esa única causa y efecto, ese umbral entre lo falso y lo verdadero, es el comienzo de la sanación.
Discernir entre lo falso y lo verdadero requiere tiempo, experiencia, prueba y error, se transforma en científico. La realidad a la que se enfrenta la enfermedad, el pecado y la muerte son falsificaciones. Estas falsificaciones, como billetes falsos, se reproducen y circulan entre nosotros, pero al ingresar a un espacio detector, como un banco, se revelan que son FALSOS, quedando retenidas junto con las ilusiones de quien las portaba: viajes, autos, compras, títulos, … todo basado en una felicidad efimera… solo valía el soplo… de palabras… que sentenciaban…y quedaban como polvo de polilla. ¿Qué queda entonces? Dejar los billetes e irse del banco, silbando bajito…. porque si llevas muchos billetes falsos... irás detrás de rejas... con pocas posibilidades de retorno, por ser un falsificador serial, consigo mismo y con otros...
Lo mismo ocurre cuando nos aferramos al personaje que la sociedad impone, creyendo que la felicidad se relaciona exclusivamente con un estatus o una profesión o roles que otorgará los honores del éxito, también son falsificado. De repente, ante una situación, la mía fue la enfermedad ante un diagnóstico médico del catálogo de incurable, todas esas ilusiones, de recibirse, de ser profesional, de ser madre, de caminar, viajar... son como billetes falsos, se desvanecen, retenidas todas las ilusiones, de lo que creía que era... y de todas a cumplirse con todos los roles billetes... devastada ante la sentencia, de la realidad implacable se hacen polvo.
El médico se convierte en el cajero del banco, da la supuesta catalogada mala noticia que hace que todas las ilusiones... de que todos los roles que iba a ser... contadora... madre... despojándonos de la ilusión.
Con el tiempo, esa supuesta "mala noticia", la cual destruyó las ilusiones... materiales, efímeras a cumplirse o no... hace un hoyo muy profundo... de las noches... más oscuras... vaciarse de todo lo efímero... para hacer fondo al SOSTEN INFINITO... se reinicia con ARTE... ese el verdadero el camino del ARTISTA... no son técnicas... es la actitud... , de permitirse descubrir lo que jamás podrá ser sustraído, retenido o destruido. Vivir entonces se trata de lo invisible a los ojos, que se torna sustancia, verdad, belleza, paz, felicidad. Esta entidad, esta esencia verdadera que nadie puede arrebatar, sustraer ni destruir, es lo que realmente importa. Es lo invisible a los ojos, lo que nada ni nadie tocará. A partir de ese momento, la actitud del artista, guardián de ese estado, se centra en estar atento a las falsificaciones, en ser un guerrero porque se es guardián de la felicidad, la paz, la bienaventuranza, sin permitir que nada ni nadie tenga mayor poder que el amor del que AMO primero. A partir de ahí, todo es puro arte: las herramientas que utilicemos para construir el puente con el que AMO primero, son los derechos de autor que le fue dada a toda la creación.
Texto: Paulina Lavergata
Obra: ATARAXIA del Maestro Eugenio Cuttica
ARTE Paulina Ataraxia
I
nscripciones: abiertas
—conEugenio Cuttica.
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